jueves, 20 de marzo de 2008


(escrito en el 2006)


1. como vinculas el pasado con el presente en tu obra
2. Cual es tu postura frente al mercado
3, Hacia quien va dirigido



En mi trabajo, para vincular el pasado con el presente, solo basta con observar las rayitas continuas que tengo ubicadas en partes sistemáticamente ocultas u obscenamente expuestas de mi cuerpo, cada una representa un trabajo, o un proyecto (a las que les dedico mas rayitas); a manera de aquellas marcas que dibuja un padre en la pared para mostrar a sus hijos orgullosos cuanto han crecido en un año. Yo veo, en mi pared de crecimiento, que para mi beneplácito, estoy abandonando aquellas muletillas en las que uno se apoya para elaborar o crear algo que de alguna manera pueda ser calificado como “arte”, aunque eso de despreciar el objeto artístico como propone el aburridísimo postmodernismo puede sonar afín a lo que aspiro; en realidad todo lo contrario. En esta vida fútil y gris, donde la naturaleza corpórea y orgánica, la integridad física esta tan sobrevaluada, este aspecto de la “vida” maneja la dirección en la que el ser humano huye despavorido en su afán por subsistir. Yo propongo como solución para la especie humana: desear, iconizar IDOLATAR el objeto inerte (quizás como residuo de un ser vivo, pero jamás el ser vivo), convertirlo en un efectivo Fetiche, extraer de él toda la esencia necesaria para esta subsistencia cotidiana. Róbale el sostén a tu novia, no la acoses; córtale un poco de pelo a “aquella persona”, así siempre será tuya..Para que entablar una burda conversación, desarrollar una efímera relación, si puedes quedarte para siempre con el olor de sus axilas en una prenda.
Se dice que en el fetichismo existe una lógica de la ausencia. Frente a una carencia, un velo la disimula, y es precisamente ese velo el que para mí debe suplir esta carencia.

Comprar un cuadro, colgarlo en tu sala, al costado del retrato del sobrinito, el cuadro esta ahí en estado estático, un cuadro que fue planteado en un ambiente quizás sórdido, quizás tan sórdido que solo deja como recuerdo un moretón en la cabeza, un cuadro que fue un grito desesperado, con lágrimas saliendo también de los poros, saliendo también de las heridas; y en este grito despavorido, con la mandíbula abierta hasta casi dislocarse; la Sra. Montes de Oca decidió congelarlo y ponerlo en su sala,….la mandíbula ahí, abiertísima, sin ya siquiera esperanzas de morir de dolor,..el cuadro fue criogenizado.

En este aspecto, mi postura frente al “Mercado del Arte”; bueno, si existiera uno en este país –bueno aparte del de las señoras que gustan de la criogenia-sería la de realizar proyectos megalómanos, en papel y planos, conseguirles financiamiento para realizarlos, y nunca limitarme por lo precario de la materia real.

En cuanto a mis cuadros “académicos”, es decir pinturas, dibujos, etc., bueno, tendría que tener un comprador que quisiera hacerme un culto y decorar la iglesia con mis cuadros; viendo eso algo difícil, supongo que quedarán almacenados con mis demás “objetos” evocativos –hablando de fetichismo.

Estaba pensando también, que a manera de recuperar aquello que se va perdiendo poco a poco en esta facultad; aquellas ganas animales y naturales de agarrar tu lapicito y “dibujar lo que te gusta” “porque te da la gana” considero que puedo financiar mi paupérrima vida haciendo las portadas para discos de música que me gusta, diseñando tatuajes, o haciendo la escenográfa de alguna obra de terror. En realidad esto me parece lo mas sincero, poniéndolo en contraste con imaginar mi mandíbula dislocada, me parece un trabajo agradable y honesto.

Para finalizar ¿Para qué publico va dirigido mi trabajo?
Bueno, considero que va dirigido a cualquier morboso que quiera acercarse a verlo, a todos les gusta ver a la victima de un atropello, o ver como el loco anda calato y se agobia gritando solo afuera del mercado; pero particularmente me interesa que aquellos pocos seres que respeto (mis amigos y algunos que no conozco pero sé que respeto) lo vean y digan “manya que paja” y articulen en su cabeza una historia, mi historia.

Pero por lo pronto los comentarios o críticas del resto de humanidad no me molestan, cojo lo que me interesa y lo demás no lo escucho; precisamente mi trabajo, en este punto, habla de eso.

Se dice que el individuo se convierte en persona cuando tiene autoconciencia, cuando introyecta el exterior en sí mismo y genera un “self”. En mi trabajo y en mi vida, he llegado a la conclusión de que lo más “limpio” e “incorrupto” es tomar estos elementos externos pero solo como “imaginarios”, como “iconos”, que representan a manera de caricaturas o animaciones la “película interior”, esta vida PROPIA, MÍA, HACIA ADENTRO.

Sócrates dijo que el ser humano es un animal social. En este afán de crear cofradías, de agruparse, de acollerarse, la humanidad se ha forjado siempre en el “grupo”, en la masa. No creo en las personas como grupo. Todo ápice de Verdad o genialidad, para mi ha sido forjado en la absoluta soledad, enajenación, vida física corta.

Bueno, le digo a Sócrates, que prefiero estoicamente quedarme con lo animal y arrancarme lo social de cualquier lugar en donde quede, aspirando algún día lograr la autonomía e independencia que posee un
PLANTA.

Atte

YO